Tu falda

Ahora no hago mas que imaginar que estarás haciendo ahora. Si tus razones son movidas por mi comportamiento o simplemente es que ya no te importo en nada.
La vida es triste, y de alegre no tiene nada; me siento solo y no hay cosa que me lo quite de la cara. Ni tu pelo, ni tu abrazo ni tus faldas.
De nada sirve ahora aceptar mi falta de tacto, por que ya se encargo el tiempo de pasarme la factura y creeme que todo lo que pague sé que lo merezco.
¿En donde estas? ¿que haces?
Ha de ser auto compasión la mía, imaginarte muy feliz y saber que no lo fuiste conmigo. O inferir a veces, por tu rostro, que has de pensar en mi nada mas como un desperdicio de tiempo. Y ahora que estés enamorada de alguien mas no habrá nadie ni nada alrededor mas que nubes, y yo no te importaré nada. Que mis lamentos no los escucharas y tal vez hasta te suenen bochornosos.

Ahora solo queda suficiente alcohol y tristeza para acabarmelo. Y cigarros para entretener mi boca y mis dedos. La platica superficial de siempre para tener algo que decir y de nuevo ese incontrolable pensamiento que ocupas tu.
Estas tan lejos, y me hago daño sin que te importe, sin que te des cuenta.