Lupe

Jamás he escrito yo sobre ella, en realidad la conozco muy poco y pocas veces había tratado yo con ella. Hoy en la mañana se me hacia familiar aquel cadáver en la portada del periódico y no pude aunque lo intenté, reconocerla. En el salón de clases lloraban y se cubrían con caras pálidas y de incredulidad. Me abate hasta cierto punto todo el duelo que mis compañeros tienen con aquella muchachita que nos acompañó hasta estos últimos meses de escuela; a pocos de terminar la carrera, que ella tanto deseaba al igual que el grupo.
No seré condescendiente y me pondré a citar todas sus cualidades y virtudes que la hacían única. Solo puedo comentar que su presencia era entretenida y amena y que hasta yo que no la traté mucho la voy a poder extrañar. Lupe se adelantó, fue un accidente, pude haber sido yo y cualquiera y se demuestra que sucede en cualquier momento, ayer pude visitarla, mientras respiraba y escucharla una ultima vez decir esas cosas que solo ella decía.
Espero, en realidad, que estés en un mejor lugar Lupe, ya sabias tu -espero- lo mucho que te queríamos los muchachos.